“Leer para ver”, en la biblioteca para ciegos
La Biblioteca Argentina para Ciegos (BAC) es una entidad no gubernamental sin fines de lucro que, gracias al constante trabajo y la solidaridad de la gente, contribuye a la máxima integración de las personas con discapacidad visual en la comunidad. Allí también funciona una imprenta braille y se realizan numerosos eventos culturales, desde conciertos hasta obras teatrales.La cultura de Buenos Aires se refleja en infinitos ámbitos del arte. Desde una pequeña poesía publicada en la contratapa de un diario hasta un anfiteatro dispuesto para el máximo exponente de la música popular. Asimismo, la Biblioteca Argentina para Ciegos es un ejemplo de despliegue artístico que expone varias bellas artes en un rinconcito de la Capital Federal, a pocas cuadras del ferrocarril Domingo Faustino Sarmiento.Esta asociación civil fue fundada el 18 de septiembre de 1924 por un grupo de personas videntes y no videntes, lideradas por el reconocido escritor Julián Baquero. Desde entonces se convirtió en un centro de aprendizaje, acceso a la información y desarrollo cultural. Dicha entidad no recibe financiamiento estable de ningún organismo estatal ni privado, y las actividades que se realizan son llevadas a cabo gracias al aporte de sus asociados, la gentileza de la sociedad, la venta de materiales específicos, la producción de proyectos populares y, finalmente, la construcción de una imprenta braille y un estudio de grabación musical profesional.La imprenta posibilita la elaboración de revistas braille (“Hacia la Luz”, “Braille Joven” y “Burbujas”), folletos, resúmenes de documentos y hasta boletas de gas. La maquinaria y la preparación son realizadas en el mismo edificio, luego se empaquetan los resultados y se envían por correo a distintos lugares del país, principalmente Córdoba. Cristina, la recepcionista de la biblioteca, amablemente nos permitió recorrer las distintas salas donde se fabrican los materiales, desde el sellado en chapa hasta la impresión desde matrices.Los servicios que brinda la BAC son realmente variados y numerosos. Dispone de la Biblioteca Braille Circulante, compuesta por más de 3.000 títulos en 15 mil volúmenes. Distribución gratuita de revistas (actualmente cuenta con 2.000 lectores, tanto en nuestro país como en el exterior), destacando a “Hacia la Luz” como la primer revista editada en sistema braille en América Latina. También cuenta con el Servicio de Libro Parlante: 1.000 obras grabadas por lectores voluntarios, equipado con una excelentísima calidad técnica y profesional. A su vez, en la BAC se dictan cursos de formación y perfeccionamiento orientados a niños y adultos con discapacidad visual: lecto-escritura braille, musicografía, informática, expresión corporal e idiomas. El estudio de grabación “Joaquín Rodrigo” fue creado allí mismo con el fin de ofrecer una salida laboral no tradicional para personas ciegas que, igualmente, posibiliten fuentes de ingreso para la institución. Y finalmente, el Ateneo Cultural “Julián Baquero”, donde se ofrecen ciclos de conciertos, conferencias, debates y representaciones teatrales abiertas a la comunidad y totalmente gratuitas. Indistintamente, el sitio web oficial (www.bac.org.ar) ofrece mayor información al respecto para todos aquellos interesados en los servicios ofrecidos por la asociación.Al cumplir 86 años de historia, la BAC fue declarada “de interés cultural y educativo” por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La sensación de comodidad absoluta y distinción hogareña son claves en el establecimiento. La biblioteca sorprende con sus inmensos libros escritos en braille (un libro braille equivale a cuatro libros estándares), y la postura de un piano de un cuarto de cola le ofrece al espacio una cuota de distinción exquisita. La amabilidad de sus integrantes es moneda corriente y le regala a su país un rincón infinito de bellas artes e integración ciudadana.AutorPablo C. Sturbapablo@medioslentos.com