Fútbol: pasión compartida entre México y Argentina, pero ante todo un gran negocio
En el transcurso de la historia, la relación México – Argentina no tiene muchos puntos en donde se hayan encontrado estos colosos de Latinoamérica. Pero en realidad, comparten muchas cosas.Primero, el idioma que arribó al continente americano por medio de los españoles nos permite comunicarnos de una manera eficiente y con un vocabulario basto que no es encontrado en otras lenguas. Compartimos también la pasión por nuestro legado: la familia es el pilar de lo que se construye y, sobre todo, el porqué lo estamos haciendo.Tanto México como Argentina son países de pasiones, pero la más grande en ambas naciones se llama fútbol. Este deporte denominado el “Juego del Hombre”, literalmente desborda pasiones en toda Latinoamérica, pero sólo llegan a exceder los límites en tres países: Argentina, México y Brasil.Si enfocamos en los dos primeros, lo prudente es empezar hablando de los combinados nacionales, ya que estamos próximos a disfrutar de una nueva edidción de la Copa América en la cuál México es un invitado especial de la COMEBOL desde la década de los 90 y en la cuales se llegó a dos finales pero nunca pudo levantar la copa. Argentina y México tienen un gran amor por sus combinados nacionales, los fanáticos los siguen alrededor del Mundo, sólo falta esperar a que llegue una de las famosas “fechas FIFA” y veremos a la albiceleste jugando en algún lugar del mundo con sus fieles aficionados alentando, a estadio lleno, como las arcas de las AFA. Este negocio es redondo para todos los que participan del mismo pues ayuda a satisfacer las necesidades de ver a los mejores jugadores del mundo en acción.Para México este fenómeno también es recurrente, la FEMEXFUT (Federación Mexicana de Fútbol) tiene contratos firmados con empresas norteamericana para llevar al “tricolor” a Estados Unidos para llenar estadios de fútbol americano o beisbol de compatriotas mexicanos que quieren ver de cerca de sus ídolos, ya que estan lejos de casa y pagan cifras increíbles por ver partidos amistosos con selecciones que no le dan a México ningun aprendizaje futbolístico. Pero la “verde” es un negocio tan grande que renovó su contrato con la multinacional ADIDAS hasta el 2018, ya que la remera de esa selección fue la más vendida el pasado Mundial, con más de 1 millón de piezas.Si nos movemos al fútbol internacional los seleccionados de ambos países también son un excelente negocios y como ejemplo tomaré a sus dos máximos exponentes actuales. Por un lado, Lionel Messi, uno de los más grandes jugadores de la historia, tiene ingresos anuales de 44 millones de dólares. Un gran negocio que además logra posicionar a las marcas que lo patrocinan.Por el otro lado, se encuentra el ya famoso Javier “Chicharito” Hernández, que está rompiendo todos los pronósticos en su primera temporada en el Manchester United, ha hecho goles en todas las competiciones en las que participó y ganó la Premier League. Su club le aumentó el sueldo, los técnicos y compañeros se han desvivido en elogios para él y esta empezando a convertirse en un ícono publicitario ya que Coca-Cola, en el Reino Unido, lo nombró la imagen de su bebida Zero quitándole el “papel” al chico malo de Inglaterra: Wayne Rooney, y los rumores lo situán ya en los grandes clubes del viejo continente por transpasos multimillonarios. Han encontrado en “Chicharito” un diamante en bruto, tanto en lo deportivo como en lo referente a Mercadotecnia.Por último, nos falta tocar el fútbol doméstico que se ha visto empapado en ambos países por los “barras bravas”. A México llegó este concepto de aficionados por medio del Club de Futbol Pachuca, que tiene entre sus directivos a Andrés Fassi, quien creó la Barra Ultra Tuza a finales de la década de los ‘90 y se expandió en los diferentes grupos de hinchas de los clubes mexicanos. Por estos días, todos los equipos tienen una barra entre sus diferentes equipos de animación. En Argentina solamente tenemos que nombrar a la “12” para temblar ante la barra más imponente del mundo. Estos “grupos de animación” son la parte que podemos mejorar ya que estos grupos son focos importantes de reventa de entradas, violencia, alcoholismo y drogas y es algo que no queremos cerca de este deporte. Una frase que redondea a las barras es que líderes de barras alrededor del mundo van a Buenos Aires a “entrenarse” con la “12” para aprender el estilo sudamericano de animación donde incluyen clases de cómo extorsionar a los dirigentes de los equipos.Por último, antes de despedirme de esta entrega netamente futbolera, quiero destacar que estamos haciendo muchas cosas bien en México en el “deporte más hermoso del mundo”, sobre todo en el aspecto económico, ya que es un negocio altamente rentalbe, aunque está acaparado por unos pocos. Tenemos el área de oportunidad en las Barras, en intervenirlas para que actúen en los parámetros que la ley lo permite, y en el aspecto futbolístico específico se deben exportar más jugadores aztecas para crecer en el ámbito internacional.Fue un placer compartir con ustedes una de mis grandes pasiones y éxito en la Copa AméricaAutorJosé Ricardo Revuelta Pérezinfo@medioslentos.com