Rock al parque, Bogotá
El festival Público de Rock más grande de Latinoamérica
El Rock al parque es el festival público más grande de Latinoamérica. El adjetivo “Público” en este caso no es sólo utilizado para describir su gratuidad, sino para definir un modelo de Festival que hace del “Rock al Parque” un evento diferente. En primer lugar la organización y el financiamiento del evento provienen en escencia del estado. (Leer más)
Rock al parque, Bogotá
El festival Público de Rock más grande de Latinoamérica
El Festival
El Rock al parque es el festival público más grande de Latinoamérica. El adjetivo “Público” en este caso no es sólo utilizado para describir su gratuidad, sino para definir un modelo de Festival que hace del “Rock al Parque” un evento diferente.
En primer lugar la organización y el financiamiento del evento provienen en escencia del estado. Esto genera una espacio donde lo primordial es el evento artístico, por sobre las posibilidades de un negocio. Esto derrama hacia cualquier instancia del festival. En primer lugar las bandas elegidas son parte de una convocatoria previa y de un concurso posterior, en el que a través de un sistema de jurados se van seleccionando las mejores bandas de la escena Bogotana, hasta llegar a las finalistas que serán parte del evento.
Las bandas
Quinientas bandas fueron las que se presentaron para esta edición y veintinueve las finalistas que quedaron sobre el escenario para brindar su espectáculo a la multitud de asistentes que poblaron el festival durante sus tres jornadas. El resto de las bandas fueron invitadas directamente y este grupo se compuso de diez bandas locales y diecinueve bandas internacionales. El criterio de las bandas internacionales también es propio de un Festival público. Más allá de algunos casos puntuales, ninguna de las participantes en esta última edición poseía nombres rutilantes que convocasen por si mismas multitudes. Se apuesta a buenas bandas, más con el objetivo de mostrar música que habitualmente no vemos, que con descollar con un nombre importante.
Lo que sigue es la crónica de tres días a puro Rock.
Día 1: La escena metalera Colombiana debe ser de las más grandes de nuestro continente. La capacidad de convocatoria y la fidelidad del público, especialmente hacia el sub género del Death Metal no deja de llamar la atención. La escena Bogotana por su parte aportó a este primer día un abanico de bandas que poblaron los tres escenarios en el día de mayor convocatoria de los tres. Sacred Goat, banda de Death Metal con la particularidad de tener como voz a una mujer, hizo explotar al escenario principal con un set hipnótico y prolijo que nada tiene que envidiarles a las bandas “Tanque” que se sucedieron luego de ellos. Vita Imana de España y Massacre de Medellín, con ya 20 años de escenario fueron las predecesoras del cierre de Cannibal Corpse, que protagonizó el punto más multitudinario del festival. Cabe destacar el show brindado en el escenario ECO por los Downset, banda de Hardcore Californiana que aportó un poco de su género a una jornada homogeneizada por el Death.
Dia2: Luego del aturdimiento metalero que nos dejó la primer jornada, en el día dos el reggae, el ska y el rockabilly se dieron paso en el festival. A juicio de este cronista la segunda jornada fue la mejor de las tres. Los tres escenarios, fueron durante toda la tarde y pese a la lluvia, sitios de buena música y fiesta popular. La sorpresa del día fue para los Mexicanos de Rebel Cats, que en base a una excelente puesta en escena y a un desempeño musical excelente hicieron explotar al público bajo la lluvia en el escenario “ECOS”. Mientras tanto en el “PLAZA”, la banda Argentina Eruca Sativa daba su show. Este día fue también el turno de un abanico de bandas Bogotanas de excelente nivel. Al tope de ellas y casi como revelación del festival emergió “Consultado Popular”.
Fusión de punk y vallenato, éste nuevo agrupamiento que prácticamente compuso la mayoría de sus temas para el festival, brindó un show de primer nivel con un cierre que incluyó rotura de guitarra y todo.
“La Real”, con sus letras combativas, “La Severa Matacera”, agitando desde el escenario consignas contra el servicio militar obligatorio y “Bambarabanda”, con una performance gitana y muy teatral, aportaron cada una lo suyo, logrando hacer bailar a todo el público presente.
“Dubioza Colective”, “Junior Kelly” y “Living Colour” ya entrada la noche aportaron su propio sonido para cerrar una jornada multifacética donde daban ganas de verlo todo
Día 3: Fue el más flojo de todos. Una falencia de la programación hizo que no sólo no sobren las bandas convocantes sino que además no estuviese claro el eje del día. Ya no era el metal del día uno, ni la fiesta del día dos. Pareció entonces esta última jornada el turno a sonidos más “Modernos” y experimentales, es decir, menos convocantes.
Para destacar de la jornada fue la actuación de “Bosnian Rainbowns” desde EEUU, el cierre del escenario principal a cargo de los Kuryaki que mostraron vigencia y un sonido de los mejores de Latinoamérica y el cierre a cargo de “Pulenta” del escenario “Eco”.
El Rock al Parque, es como dijimos el festival público de rock más grande de Latinoamérica. Esto le da una visibilidad que lo convierte muchas veces en blanco de críticas de parte de todo el público. El derecho a criticar aspectos del festival es un algo consagrado por el hecho de que el Festival es de los Bogotanos, y a él contribuyen con sus impuestos. Es un derecho saludable y habla de algo que se ganó el público rockero de la ciudad Colombiana. Ese debate es saludable y sólo puede darse en un espacio de estas características.
Mas allá de los aspectos a corregir, como el tema grilla sobre todo, lo que pudo ver este cronista fue un torbellino musical que le aporta frescura a Latinoamérica. Un combo de bandas que no sólo construye su identidad en base al divertimiento en ese momento espacial y temporal, sino hacia adelante en la búsqueda de nuevos sonidos. Eso siempre es saludable.
Autor
Matias Mera
@xmambrux
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