Reunidos en el tiempo
«Amaicha del Valle es, tal vez, la última localidad tucumana que atesora los vestigios de una sociedad, la indígena, que con el tiempo fue avasallada por el colonialismo.Situada en el departamento de Tafí del Valle, es un extenso territorio que cubre desde el Abra de El Infiernillo, continuando por las Cumbres Calchaquíes hacia el Norte, hasta el Cerro Pabellón y, en dirección Oeste hasta la rivera este del Río Santa María. Amaicha, es el destino elegido por miles de turistas cada año, quienes desean escapar de la rutina de la ciudad, para admirar sus paisajes rodeados de montañas que son abrazados por el sol casi en la totalidad del año.Eso, la pureza de su aire, la tranquilidad de un pueblo que aún conserva tradiciones de dos siglos atrás, sus casitas de piedras que suelen ser construcciones de más de 80 años, sus calles de tierra, sus paisajes imponentes, hacen de Amaicha (Reunión en quechua) una localidad en la que parece que el tiempo no ha transcurrido.Como colarario, apenas a 18 km al noroeste de Amaicha, se encuentra la Ciudad Sagrada de Quilmes, el último bastión de resistencia contra la invasión española.»Fotografías de Verónica Crespín[slideshow id=1]