Esta vez vamos a hablar un poco de las O.N.G (Organizaciones No Gubernamentales) que muchas veces aparecen para sacar adelante a las víctimas, orientándolas y ayudándolas a hacer una denuncia, a la vez que le dan un acompañamiento en lo que necesitan, como por ejemplo las contactan con un psicólogo, o les gestionar algún subsidio.
Pero cabe destacar que muchas oportunidades no es así, porque en varias ocasiones veces se aprovechan de lo vulneradas que llegan las víctimas y las vuelven a explotar, pisoteando sus derechos, y entonces la persona siente que siempre se les debe algo, que se debe hacer lo que ell@s pidan, porque se sienten culpables.
Les hacen sentir que por lo poco que les ayudaron se les debe algo.
Yo de corazón les digo que no es así, que nosotras debemos sentirnos orgullosas de lo que vamos logrando cada día.
Quienes te ayudan o te ayudaron lo hacen de corazón sin pedir nada a cambio. Tenemos que saber que si pudimos sobrevivir a tanta crueldad, somos también capaces de sobrevivir a todo lo bueno que va ir llegando: quien da algo de corazón jamás pide ninguna recompensa a cambio.
Somos dueñas de nuestra propia vida, somos tan fuertes que siempre podemos salir adelante, podemos lograr lo que nos propongamos y así podremos cuidar el futuro.
Somos mujeres luchadoras, somos únicas y tenemos la capacidad de conseguir lo que nosotras queremos.
Mujeres no tengan miedo. Saben, yo logré salir adelante, formé una familia, recuperé un hijo que me habían quitado, pude encontrar trabajo.
Puedo guiar a muchas a otras a transitar momentos, a ayudarlas en los trámites que tienen que hacer sobre su situación (como por ejemplo una denuncia), asistir y hacer que nos devuelvan nuestros derechos.
Yo también con mi edad pude estudiar, me capacité en distintas áreas contra la violencias de género y la trata de personas.
Yo pude volver amar y a confiar en las personas. Hoy soy más fuertes ya nadie puede callarme, ya nadie me puede explotar.
Yo soy fuerte y ustedes también deben serlo.
Acá estoy para ayudarlas no solo con mi historia, sino con mi acompañamiento cuando sientan que la vida no da para más.
Nunca se olviden son y somos fuertes, grandes mujeres, capaces de superar cada inconveniente que se nos presente.
NO DEJEMOS NUESTRA VIDA EN MANOS DE NADIE, SOLAMENTE NOSOTRAS SOMOS LAS QUE DECIDIMOS QUÉ HACER CON NOSOTRAS Y NUESTRA VIDA.