La ciencia de transmitir ciencia


La ciencia de transmitir ciencia

En el marco del Seminario Interamericano de Periodismo y Comunicación Científica organizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y la Organización de los Estados Americanos resultaron opiniones enfrentadas entre los usos de metáforas para la divulgación de la ciencia, se habló de la necesidad de explotar más la ciencia y tecnología para el desarrollo y se definió la crisis del periodismo de cara al futuro y las nuevas tecnologías. ¿Cómo se sigue después de Internet?“Poner a la ciencia y tecnología como motor del desarrollo económico y social en América latina lleva un retraso considerable”, destacó el Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva Lino Barañao en el marco del Seminario Interamericano de Periodismo y Comunicación Científica que se realizó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires del 13 al 15 del corriente mes. Trasmitir conocimientos no deja de ser una tarea científica, el detalle es que son los periodistas los que toman este papel especializándose y colaborando con los investigadores para llevar adelante esta tarea.En el encuentro, con representantes latinoamericanos y españoles, se discutieron temas que competen a la profesión intentando buscar nuevas alternativas para que  la noticia científica interese y llegue al público. En los distintos paneles se encontraron opiniones enfrentadas ya que hay quienes creen que las analogías, metáforas y demás recursos que utilizan los medios para llamar la atención de la audiencia sacan del eje a la noticia. Entre ellos, se discutió el término “la máquina de Dios” que le puso la prensa al acelerador de partículas. Nora Bar, periodista de La Nación, por citar un ejemplo, estaba de acuerdo con  este término. Destacó que ayudaba a la “lucha por la supervivencia de las noticias científicas, que compiten con economía, política y demás secciones del diario. Tenemos que usar nuestro ingenio para atraer al público a nuestros temas, no basta con tener una información importante”.Se compartieron experiencias de divulgación de otros países y de cómo lograron distintos avances con políticas gubernamentales, tal el caso de Ecuador retratado por Patricia Ruiz Mora, de la Secretaría Nacional de Ciencia y Técnica de su país, quien relató cómo se acercan a las comunidades, una por una, integrándolas y compartiendo experiencias didácticas e interactivas.Sin embargo, no todo fue alentador ya que se definió una situación de crisis en el periodismo científico y general con las nuevas tecnologías, donde Alejandro Piscitelli, profesor titular de la Universidad de Buenos Aires, San Andrés y entre otras universidades argentinas y latinoamericanas, y autor de diversos libros de comunicación y tecnología, alertó acerca de la necesidad de replantear la profesión periodística. “No puede haber un periodista que no entienda bien cómo funcionan los motores de búsqueda, que no sepa grabar y editar audio y video, y que no ande por el mundo con un dispositivo móvil. Se está mostrando que el futuro del periodismo científico va a ser un híbrido, una fusión de lo viejo con lo nuevo y será un rescate de la calidad en todos los soportes”, destacó Piscitelli.Informó a su vez a los asistentes del seminario, todos involucrados con la comunicación en diversos aspectos, que existen ahora nuevos medios de comunicación científica como www.mendeley.com o www.plos.org que son nuevas bases de información científica que ayudan a no depender de las costosas publicaciones en las revistas internacionales y que permiten el acceso de un público profesional o no, simplemente interesado en informarse.Las nuevas tecnologías, como destaco Piscitelli, a su vez permiten la interacción, lo que hace que la audiencia busque la información y no espere lo que le brinda el periodismo únicamente, por lo que pasa a ser un ida y vuelta entre periodistas y consumidores de los medios de comunicación.Por todo esto, los interesados en ciencia tienen un desafío que es redefinir estos espacios de transmisión de información, lo que requiere de la participación tanto de generadores de prensa como de los consumidores, para ayudar a entender que es lo que exigen las nuevas tecnologías y las nuevas generaciones con respecto a la comunicación científica.AutorDaniela Raschcovsky