Lentes de sol, de aumento, de descanso… ¿cuál utilizo para cada momento?
Según dónde nos enfocamos, es lo que observamos, es la manera de dar sentido a lo que acontece. Cuando me refiero al tipo de lentes que se pueden llegar a utilizar según el momento del día, no me refiero estrictamente a la capacidad biológica que tenemos de ver, sino al lente interno con el que nos valemos para observar los hechos. A partir de esa mirada, qué cambio somos capaces de generar para nuestra vida y para nuestro entorno.Podría enumerar algunas historias personales que me valieron cambiar el lente interno para seguir adelante. Posiblemente, quien esté leyendo este artículo estará recordando alguna vivencia por la cual se dijo: “Sí, seguí adelante”. Recuerdo las anécdotas de mi amigo de la vida, Pepe, quien fue actor principal en la guerra de Malvinas. Sobrevivió al naufragio del Crucero General Belgrano tras 28 horas de esperar por el rescate en las frías aguas del sur argentino.¿Qué es necesario cambiar en ese momento para seguir, para apurarse, para respirar profundo y decir: “Se puede”? Son tres pilares los que podemos modificar para cambiar el lente de nuestra vida: las emociones, el lenguaje (verbal, corporal y gestual) y el cuerpo.El lenguaje, en sus diversas formas de expresión, habilita la posibilidad de generar nuevas realidades, permite hablar sobre diversos intereses, abre el juego para seguir o parar. De esta forma, tenemos el poder y la responsabilidad, al elegir, de generar nuestra propia realidad.Al observar con estos pilares podemos dar sentido a lo que ocurre y en función de ese sentido se pueden generar determinadas acciones. Finalmente, a eso le corresponderá un resultado como consecuencia de esas acciones. Dichos resultados, si generan satisfacción, validan ese modo de observar, accionar y obtenerlos. Esto se refleja en frases como “esta es la verdad” o “es así como son las cosas”. Lo interesante es que “es así como son las cosas”, funciona para mí o para quien se encuentre en esa misma situación. Pero en un escenario futuro se tomará ese enfoque.En la medida que trascurren las horas, los días, los años, la vida nos enfrenta a un sinfín de momentos, y utilizar el mismo enfoque, nos deja en el mismo lugar. ¿Qué sucede cuando queremos llegar a otro destino? Hay infinitas formas de aprender y quizás el desafío mayor sea elegir la opción apropiada para avanzar, según la expectativa planteada. Hoy presento tres maneras. La primera es hacer las cosas de un modo y obtener un resultado: se hacen así, porque así se hicieron siempre y así funcionaron. El cambio sucedería a partir de circunstancias o elementos externos.En una segunda instancia, para cambiar y ampliar el modo de observar, modifico el enfoque y genero una acción nueva. Por ejemplo, incorporo alguna formación sobre temas específicos antes desconocidos. Con un curso de manejo podré utilizar el auto y sabré tener dominio para conducir. De esas instancias sabemos y conocemos infinidad de ejemplos.La tercera opción es girar la mirada hacia nuestro interior y conocer de qué forma utilizamos el lenguaje, las emociones y corporalidad. De este modo puedo elegir cambiar el observador que soy para dar sentido a una forma que me permita llegar al destino deseado. Estos tres elementos son un sistema, basta modificar uno de ellos para que genere réplica en los dos restantes.El tipo de lente que utilizamos cambia dependiendo de nuestra edad, momento y circunstancias. Para poner un ejemplo corriente, podría también utilizar el ejemplo del calzado que usamos en función del tipo de actividad que vayamos a realizar. Repetir siempre lo mismo nos deja en situación de agotamiento, desgaste y a veces de hartazgo. Otras, de comodidad.Quizás del mismo modo, mirar con el mismo lente genere siempre la misma historia, vea un desgaste y no avance. El desafío y la responsabilidad es, a partir de los diferentes tipos de aprendizaje, saber cuál utilizar en nuestra vida para generar espacios de cambio.AutorVanesa AmenabarLic. Adm. Coach Ontológico. Practitioner en Programación Neurolingüística.Información: 011- 15.3356. 0642mujeresquehablan@yahoo.com.ar